Los niños deben aprender a comer ....... con el permiso de sus padres y de los sanitarios
Es muy habitual encontrarse con un niño (sobre todo lactante o preescolar) que come mal o que a menudo no quiere comer. Y eso a pesar de que la alimentación es una necesidad básica de los humanos. En la mayoría de los casos no quiere comer lo que sus padres o cuidadores pretenden que coma y que habitualmente es más de lo necesario. No olvidemos que la epidemia actual es la obesidad. Y estos niños malcomedores casi siempre están sanos, no tienen ninguna enfermedad. Simplemente no han aprendido a comer.
Ocurre esto desde la época del biberón en niños cuyos padres eligieron lactancia artificial. Los padres preparan una cantidad y suelen esperar que el niño tome todo. Esta es una de las muchas diferencias ente la lactancia artificial y la lactancia materna: el niño que mama come lo que quiere y cuando quiere.
Esta excesiva preocupación por comer y consiguientemente por engordar que tienen los padres y las madres, suele estar alimentada (y nunca mejor dicho) muchas veces por el personal sanitario que trata con las familias. Si durante el periodo de lactancia (materna o artificial) no damos buenos consejos y no valoramos adecuadamente lo que el niño come y si en el momento de introducir la alimentación complementaria no lo hacemos de forma adecuada y nos dedicamos a presionarles con ella, conseguiremos que los niños no aprendan a comer. Y a consecuencia de ello aparecerán muchos problemas que repercutirán en el desarrollo del niño. La lactancia materna debe ser a demanda, lo que el niño quiera y cuando quiera. Pero la lactancia artificial también debe ser a demanda y no con unas cantidades rígidas que no respeten el apetito del niño. NO hay que obligar a comer a un niño, ni cuando está sano y menos cuando está enfermo.
La Comisión Europea de Salud Pública junto con la OMS y otros organismos establecieron hace más de 10 años las "Normas de alimentación de los lactantes y niños pequeños", donde junto con el establecimiento de que la lactancia materna debe ser la norma, se establece como se debe introducir la alimentación complementaria. Todo ello es importante para conseguir que la población infantil coma adecuadamente y esté sana.
Por último citar el reciente informe de la OCDE en el que se alaba la magnífica esperanza de vida que existe en España (83 años) solo superada por Japón. Sin embargo el citado informe advierte del aumento progresivo en España de las tasas de sobrepeso y obesidad infantil. Solo con un buen aprendizaje del hábito de comer se podrían disminuir las citadas tasas. Y esa es una tarea de los padres y también de los sanitarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario